
ECOSISTEMAS EN PELIGRO
Recubierta de bosques tropicales y de zonas húmedas, la región de San Martin, sufre durante los últimos años, la creciente deforestación masiva de los territorios de áreas verdes, instigadas por la construcción de carreteras, así como para la siembra de campos de maíz u otras especies como el café. Alrededor de 1,6 millones de hectáreas de selva primaria, han sido ya deforestadas en los últimos cincuenta años. Si nada cambia, San Martin podría perder sus bosques de aquí al 2050, y con ellos los fundamentos naturales, cuya población necesita asegurar para el bienestar de su población.
NUESTRO TRABAJO Y NUESTROS ALIADOS EN EL TERRENO
Urku Estudios Amazónicos, organización ubicada en la ciudad de Tarapoto, en colaboración con Reforest’Action tienen como objetivo restaurar la selva amazónica, situada en parte en el área de conservación Cerro Escalera., plantando árboles de diferentes especies que aportan numerosos beneficios a las comunidades locales: manchinga, Capirona, Cedros… Tantas especies consideradas en peligro después de la lista roja de la UICN, cuyo fin principal es la preservación esencialmente.
Daniel es el fundador de la organización Urku Estudios Amazónicos. La asociación se dedica a albergar animales salvajes provenientes del tráfico ilegal, gestiona un vivero con capacidad de 10 000 plantas de diferentes variedades y se ocupa de la logística de las plantaciones realizadas con los fondos de Reforest’Action. Daniel y su equipo proporcionan las plantas a los campesinos, quienes posteriormente las plantan en sus terrenos o directamente en la selva, haciendo un llamado al uso de sus conocimientos ancestrales en materia de asociación de especies. Junto con las cooperativas locales, Daniel garantiza el buen crecimiento de los árboles.


Juan, un agricultor de la comunidad nativa de Kawana Sisa, ha plantado 6 000 árboles sobre su parcela. Al final, algunos de esos árboles, como las capironas o los pinos chunchos, podrían ser aprovechados como madera de construcción. Las copaybas están dotadas de virtudes medicinales: su aceite es muy reconocido por ayudar en la cicatrización celular y la rehidratación de la epidermis.
Milton ha plantado 15 000 árboles en su parcela cercana al caserío de San Juan de Miraflores. Notamos, un gran número de árboles de manchinga, cuyas hojas y frutos están dotadas de grandes virtudes nutritivas. Los árboles de bolayna servirán como madera de construcción. Los ingresos por su aprovechamiento serán muy valorados por Milton y su familia.


Debner estudió la carrera de técnico agropecuario en el Instituto Tecnológico de El Dorado, un instituto público para adultos situado en San José de Sisa.
En el instituto, los estudiantes han plantado 4 000 árboles, gracias al compromiso que tiene su directora, Manuela. Sus productos permiten hoy en día al instituto de funcionar autosuficientemente, a pesar de no recibir suficiente ayuda del estado.

Rosa es miembro de la cooperativa agraria Mushuk Runa y se ocupa voluntariamente de hacer germinar las semillas y mantener el vivero en el caserío de Veinte de Mayo, cuya capacidad de producción es de 250 000 plantas por año. El financiamiento de Reforest’Action ayuda para comprar las semillas y el material para el vivero, así como para transportar las plantas hasta las parcelas.


Orlando pertenece a la comunidad nativa de Ishichiwi y preside la cooperativa agraria local, Mushuk Runa. Ha plantado más de 10 000 árboles, entre manchinga, cedro, bolayna y shayna.